Muerte de Yahya Sinwar: cómo un encuentro fortuito llevó al asesinato del mayor enemigo de Israel
Un grupo de soldados israelíes atacó al líder de Hamás en un suburbio de la ciudad de Ráfah, al sur de Gaza
Tras más de un año de persecusión, Yahya Sinwar, el dirigente de Hamás y autor intelectual de los ataques del 7 de octubre que desataron la devastadora guerra de Israel contra Gaza, fue finalmente abatido tras un encuentro fortuito con soldados israelíes.
El político (62), quien había sido escogido para dirigir el grupo paramilitar tras el asesinato de Ismail Haniyeh en julio por parte de fuerzas israelíes, lideraba la lista de los más buscados por Israel y presuntamente se estaba escondiendo en la enorme red de túneles construida bajo Gaza a lo largo de las últimas dos décadas, protegido por guardaespaldas y por lo que voceros de Israel han llamado reiteradamente un “escudo humano de rehenes”.
Pero a medida que la implacable ofensiva israelí seguía descubriendo más túneles, Sinwar dejó de utilizar teléfonos móviles y otros equipos de comunicación que podrían haber permitido a los servicios de inteligencia israelíes localizarlo.
Al anunciar su muerte el jueves, los funcionarios israelíes explicaron que había salido de la red de túneles ubicada en el sur de Gaza para intentar dirigirse a un lugar más seguro; en ese momento fue hallado por soldados israelíes que patrullaban el suburbio de Tal al-Sultan, en la ciudad sureña de Ráfah.
Al parecer, se encontraba solo con otros dos hombres cuando los soldados —que los funcionarios de defensa israelíes describieron, en diálogo con The New York Times, como un grupo de comandantes de escuadrón en entrenamiento— se toparon con él mientras realizaban una operación de rutina el miércoles.
A última hora de la tarde, en Ráfah, tropas israelíes en entrenamiento del 828° batallón, una mezcla de soldados novatos y reservistas, detectaron a tres figuras sospechosas que se desplazaban de “casa en casa, huyendo”, según informaron voceros del ejército israelí.
Los soldados dispararon contra el grupo, tras lo cual uno de ellos habría quedado herido y se habría escabullido solo hacia un edificio. Enviaron un dron pequeño a buscarlo.
El jueves, el ejército difundió imágenes grabadas por ese dron, en las que se ve a Sinwar, malherido en una mano, sentado en una silla y con el rostro cubierto por un pañuelo. En el video se le ve intentando lanzar un palo al dron, en un esfuerzo inútil por derribarlo.
“Intentó escapar y nuestras fuerzas lo eliminaron”, dijo el jueves el contraalmirante Daniel Hagari, vocero del ejércio israelí.
Según informes difundidos por los medios de comunicación Israelí, se ordenó disparar proyectiles de tanque contra el edificio, lo que terminó colapsándolo.
En ese punto, Sinwar seguía siendo identificado únicamente como un combatiente, y las tropas israelíes del 450° batallón de infantería recibieron la orden de asaltar el edificio para examinarlo más de cerca. Al entrar, se dieron cuenta del parecido del hombre con el líder de Hamás, y notaron que llevaba un arma, un chaleco antibalas y 10.800 dólares.
Por temor a que el cuerpo pudiera estar repleto de explosivos, las tropas inicialmente le extrajeron una parte de su dedo y la enviaron a Israel para realizar pruebas, antes de llevar el cadáver al país.
Mientras tanto, se difundían en línea fotos espeluznantes del cadáver de Sinwar, lo que obligó al ejército a publicar un comunicado en el que se informaba que estaban investigando la posibilidad de que el líder de Hamás estuviera muerto. Horas después, se confirmó su fallecimiento.
En Israel se habían recogido muestras del ADN de Sinwar durante las décadas que pasó encarcelado en el país, antes de su liberación en un intercambio de prisioneros en 2011. Hagari explicó que dicho ADN fue hallado en un túnel a varios cientos de metros del punto en el que fueron encontrados, hace seis semanas, los restos de seis rehenes israelíes.
“Las docenas de operaciones llevadas a cabo por las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) y la ISA (la Agencia de Seguridad Israelí, o Shin Bet) durante el último año, y en las últimas semanas en la zona donde fue eliminado, restringieron el movimiento operativo de Yahya Sinwar mientras era perseguido y condujeron a su eliminación”, dijeron voceros del ejército israelí en un comunicado.
Aunque, tras la muerte de Sinwar, las familias de algunos rehenes israelíes pidieron que se llegara a un acuerdo para poner fin a la guerra y liberar a sus seres queridos, los funcionarios de alto rango al parecer dieron a entender que siguen determinados a continuar con el conflicto.
“Hoy, el mal recibió un duro golpe. Pero nuestra misión aún no está completa”, dijo el primer ministro Benjamin Netanyahu, quien añadió que se mantendrían firmes en su determinación de liberar a los rehenes.
Por su parte, Yoav Gallant, ministro de defensa de Israel, expresó: “Sinwar murió herido, perseguido y huyendo; no murió como un comandante, sino como alguien que solo se preocupaba por sí mismo. Este es un mensaje claro para todos nuestros enemigos”.
Traducción de Sara Pignatiello