Lula y Petro abogan por la integración de una Latinoamérica que enfrenta tensiones
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y su homólogo colombiano, Gustavo Petro, abogaron el miércoles por la integración Latinoamericana en un encuentro oficial en Bogotá, cuando la región enfrenta tensiones políticas por la reciente irrupción en la embajada mexicana en Ecuador y la campaña electoral en Venezuela.
“Tenemos que asumir la responsabilidad de qué Sudamérica queremos, qué país queremos ser y qué política de integración queremos”, señaló Lula da Silva, en un foro con empresarios de ambos países citado en la capital colombiana, durante su visita oficial.
A juicio del mandatario brasileño, los países de la región nunca habían estado “tan separados como estamos ahora” y señaló que en años anteriores, aunque con divergencias políticas notorias, sabían que “solo juntos” lograrían industrias más competitivas, crecimiento económico y la generación de más empleo.
En la misma línea y también sin mencionar ninguna de las tensiones diplomáticas de sus vecinos, Petro aseguró que Colombia y Brasil “deben dar un campanazo de avance en la integración” para empujar a la región ante las “dificultades de integración latinoamericana por problemas políticos que surgen en estos días”.
Para Lula, la integración pasa por mayor apertura económica y propuso a Colombia identificar los obstáculos que estorban en las negociaciones para exportar. “Entre más fuertes seamos, más los Estados Unidos nos respetarán, más nos respetará la Unión Europea, Rusia y la India”, agregó.
Rafael Piñeros, coordinador de Relaciones Internacionales de la Universidad Externado de Colombia, cree que, además de las intenciones, faltan más “mecanismos expeditos que permitan desbloquear la integración económica y comercial” regional.
“Hoy hablar de integración después de una pandemia y gobiernos conservadores que prácticamente sepultaron a Unasur, resulta un poco difícil, pero no quiere decir que no sea una estrategia y objetivo histórico de Brasil y de Colombia”, dijo Piñeros a The Associated Press.
La reunión de los líderes izquierdistas sucede cuando en su vecino Venezuela avanza un proceso electoral en el que el presidente Nicolás Maduro busca su tercer mandato en medio de denuncias de sectores opositores de bloqueos para competir en las urnas. El miércoles Estados Unidos volvió a imponer sanciones al petróleo de Venezuela, después de que Maduro incumpliera acuerdos electorales.
Aunque en las declaraciones del miércoles, ni Lula ni Petro se refirieron a Venezuela, sí lo hicieron antes al manifestar su preocupación por los obstáculos que no permitieron a la oposición venezolana inscribir a Corina Yoris, elegida como sustituta de María Corina Machado ante su inhabilitación para ocupar cargos públicos. Eso generó una respuesta de rechazo del gobierno de Maduro, por lo que consideró una intromisión en sus asuntos internos.
“Lo coyuntural los pone en una situación difícil, en especial porque otros líderes como Gabriel Boric han tenido una voz más crítica con lo que sucede en Venezuela”, indicó Piñeros.
También está en el radar de ambos mandatarios la tensión con Ecuador por la violenta irrupción de las fuerzas de seguridad ecuatorianas en la embajada de México en Quito el 5 de abril para detener al exvicepresidente Jorge Glas, quien teniendo dos condenas por corrupción en su contra había recibido asilo de ese país.
Lula y Petro fueron parte de los mandatarios que la víspera rechazaron la irrupción de la embajada durante una reunión virtual de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC). Petro dijo que se trató de un acto de “barbarie”, mientras que Lula instó por que México y Ecuador dialoguen.
Colombia y Brasil comparten una nutrida agenda bilateral y el miércoles los gobiernos suscribieron tres acuerdos y cuatro memorandos de entendimiento en un amplio espectro que incluye la lucha contra el hambre, contra la trata de personas, protección de los derechos de personas LGBTIQ+, migrantes y adultos mayores, turismo y comunicación.
Además, ambos mandatarios se mostraron dispuestos a impulsar la ampliación del comercio y a trabajar en proyectos conjuntos, que incluyan la producción de energías limpias y la protección de la Amazonía.
“La selva amazónica no debe ser un abismo, sino un puente, y ese es el cambio que tenemos que dar próximamente. Tenemos que hacer el esfuerzo común porque se trata de salvar la selva amazónica de la depredación mafiosa que está destruyendo la selva amazónica”, instó Petro.
Las exportaciones e importaciones entre Brasil y Colombia sumaron a 5,6 millones de dólares en el 2023, según el Ministerio de Comercio colombiano. Entre las exportaciones a Brasil hay carbón, así como aceite de palma y fungicidas. Mientras que Colombia compra a Brasil vehículos, cereales, productos farmacéuticos y alimentos.
Dentro de su agenda en Colombia, Lula participará el miércoles en el acto de apertura de la inauguración de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, en la que Brasil es el país invitado de honor.