Tiroteo en Texas: las víctimas asesinadas incluyen a dos pares de primos en edad de primaria

Dos pares de primos se encontraban entre los niños que fueron brutalmente asesinados a tiros durante un tiroteo masivo en una escuela primaria en Texas, según confirmaron los informes de noticias locales.

Los familiares de la alumna de tercer grado Annabelle Guadalupe Rodríguez, de 10 años, confirmaron la muerte de su hija, horas después de haber emitido un llamado para denunciar su desaparición.

La familia de Annabelle confirmó a KHOU de Houston que ella estaba en el mismo salón de clases de cuarto grado que su prima, Jackie Cazares, de 10 años, el martes cuando un adolescente armado atrincheró a docenas de estudiantes y dos maestros dentro de la escuela primaria en Uvalde antes de abrir fuego contra el grupo desprotegido.

Polly Flores, la tía de Jackie y la tía abuela de Annabelle, le dijo a The New York Times que Jackie acababa de celebrar su primera comunión y era la más sociable de los dos niños de 10 años.

“Ella era extrovertida; ella siempre tenía que ser el centro de atención”, dijo Flores al Times . “Ella era mi pequeña diva”. Annabelle, respondió, era la más reservada del dúo y una estudiante del cuadro de honor. Las dos niñas estaban tan unidas que, según los informes, la propia hermana gemela de Annabelle estaba “siempre celosa”

En una publicación de Facebook desgarradora, el padre de Jackie compartió una foto de su hija en lo que parece ser una foto reciente de su comunión, celebrada solo dos semanas antes de su prematura muerte.

“Hay unas cuantas personas que no podremos abrazar ni besar a nuestros bebés esta noche. A mi familia y a mí nos quitaron a mi niña”, comienza Jacinto Cazares. “Estamos devastados de maneras que esperamos que nadie sufra nunca. Arrancada de los brazos y de la vida, de esta maldita forma cobarde, tan joven, tan inocente, llena de vida y amor. Nos duele hasta el alma”.

“Que tu fallecimiento no sea en vano, algo se hará, te lo prometí. Quédate en paz con el resto de los ángeles, cariño”, cerró Cazares, antes de cerrar la sesión: “Papá, mamá, hermana, hermano y toda la familia te extrañarán por siempre”.

Los padres de Annabelle reportaron su desaparición y habían estado buscándola frenéticamente hasta tarde el martes por la noche. SUu padre reclutó la experiencia de la policía local proporcionando una foto a los guardabosques de Texas con la esperanza de que la circulación de la foto de su hija tal vez ayudaría a regresarla a casa de forma segura.

Un segundo par de primos también murieron durante la tragedia del martes, según confirmaron informes de noticias locales.

Jailah Silguero, también de 10 años, era la menor de cuatro hijos y “la bebé” de la familia, dijo su padre, Jacob Silguero, a The New York Times. “No puedo creer que esto le haya pasado a mi hija”, dijo. “Siempre ha sido un temor mío perder un hijo”.

El primo de Jailah, Jayce Carmelo Luevanos, de 10 años, murió en el mismo salón de clase, de acuerdo con la confirmación de los miembros de la familia en publicaciones de Facebook que conmemoran a la pareja, y también informó WSB-TV.

Los padres de niños que asistían a la escuela todavía esperaban ansiosamente noticias de sus seres queridos durante todo el día y hasta la noche, y muchos describieron esperar para dar muestras de ADN a los investigadores después del ataque.

Las familias se reunieron en un centro cívico cercano hasta tarde el martes por la noche para esperar noticias de sus hijos que asistían a Robb Elementary School, a unas dos millas (3 kilómetros) de distancia, informó CNN. Algunas familias esperaron 12 horas en el centro para recibir actualizaciones sobre el tiroteo.

Los padres rompieron a llorar cuando se enteraron de lo que le había pasado a sus hijos y se escuchó que un hombre sollozó mientras se alejaba del centro diciendo en su teléfono “ya no está”.