¿Qué es la peste porcina africana?
Los veterinarios advierten que tardar más en introducir nuevos controles fronterizos posteriores al Brexit aumenta el riesgo de que el ganado del Reino Unido esté expuesto a enfermedades porcinas muchas veces mortales
La Asociación Veterinaria Británica (BVA) advirtió que, de haber más retrasos en los nuevos controles aduaneros sobre la importación de productor animales y vegetales al Reino Unido, habría una ameanza de “abrir aún más la puerta a una posible incursión de la peste porcina africana”, que se dice que ya está “expandiéndose rápidamente” en Europa.
El Reino Unido quedó fuera de los sistemas de seguridad y bioseguridad de la UE desde el Brexit y los nuevos controles, previstos para julio, son esenciales para proporcionar una “primera línea de defensa” contra los virus, dijo la organización.
Tras ser pospuesto repetidamente, aparentemente Downing Street está reconsiderando los controles por temor a que puedan aumentar aún más la crisis del costo de vida al aumentar el costo del comercio a través del Canal de la Mancha y disuadir a los negocios con aún más trámites burocráticos relacionados con el Brexit, lo que llevaría a más escasez en los supermercados e incluso aumentos más altos de precios.
“Sería profundamente erróneo retrasar aún más la necesidad de estos controles vitales y, al hacerlo, debilitar esta capa de protección para la salud animal y pública”, comentó a los ministros James Russell, vicepresidente senior de BVA, advirtiendo que hacerlo “causaría estragos”.
Entonces, ¿qué es la peste porcina africana y por qué es tan preocupante?
La peste porcina africana es una enfermedad altamente infecciosa que afecta a los cerdos y jabalíes y se contrae normalmente al comer carne contaminada, al entrar en contacto con otros animales que portan el virus o sus heces o al tener contacto con cualquier otra cosa que lo tenga, desde ropa hasta vehículos.
No afecta a las personas, pero sin darse cuenta pueden transmitirlo a los cerdos.
La peste porcina es distinta de la gripe porcina, aunque sus síntomas son similares.
Los cuatro principales síntomas que los granjeros pueden detectar en los cerdos y que indican que lo han contraído, según el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales (Defra), son: fiebre, pérdida de apetito, falta de energía y muerte súbita sin previa señal de que algo estaba mal.
Los síntomas secundarios incluyen: vómitos, diarrea, piel enrojecida u oscura alrededor de las orejas y el hocico, secreción de los ojos o las fosas nasales, dificultad para respirar y tos, abortos espontáneos en cerdas gestantes, debilidad general y andar inestable.
Hay diferentes variantes de peste porcina africana que van desde leves a graves, en cuyo caso es probable que resulte fatal.
Se aconseja a los ganaderos que practiquen estrictas medidas de bioseguridad para evitar la propagación de la peste porcina en sus instalaciones mediante el uso de ropa y botas protectoras, la desinfección periódica de vehículos y equipos y la eliminación de restos de comida fuera del alcance de los cerdos.
Cualquier persona que sospeche que se está produciendo un brote debe informarlo de inmediato a través de la línea de ayuda de servicios rurales de Defra al 03000 200 301.
Si bien el Reino Unido actualmente está libre de la enfermedad, los casos en cerdos domésticos en Europa se han disparado en los últimos 12 meses y se han reportado en Bulgaria, Alemania, Letonia, Moldavia, Macedonia del Norte, Polonia, Rumania, Rusia, Serbia, Eslovaquia y Ucrania, de ahí la preocupación de la BVA por su introducción accidental en Gran Bretaña a través de productos porcinos importados sin tener controles fronterizos seguros establecidos.
Mientras tanto, se han informado casos en jabalíes en Bulgaria, Estonia, Alemania, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumania, Rusia, Serbia, Eslovaquia, Ucrania e Italia durante el último año.