Japón bloquea la vista del monte Fuji para parar el mal comportamiento de turistas
Los vecinos y comerciantes de la zona llevan años quejándose de las conductas inapropiadas de los turistas
Las autoridades de un pueblo japonés instalaron el martes una gran red que bloquea la vista del monte Fuji, una medida que pretende evitar que los turistas se tomen fotos en el lugar.
El motivo de la decisión tiene que ver con que los vecinos de la zona llevan años quejándose de que los visitantes extranjeros ensucian los alrededores, circulan en zonas no autorizadas e infringen las normas de tránsito con el objetivo de tomar la foto ideal del icónico estratovolcán.
El sitio en cuestión ofrece una vista panorámica de la montaña con su cima nevada, justo detrás de una tienda de comestibles, por lo que muchos turistas se estacionan incorrectamente o impiden que otros transeúntes circulen por la acera.
La red mide 20 m de largo por 2,5 m de alto.
“Espero que así se eviten ciertas conductas peligrosas”, declaró Michie Motomochi a la agencia de noticias AFP, vecina de 41 años que atiende una tienda de dulces tradicionales japoneses en Fujikawaguchiko.
“Me parece desalentador. Es un lugar emblemático para tomarse fotos”, manifestó Christina Roys, una turista de 36 años proveniente de Nueva Zelanda.
Y luego, finalizó: “Pero es entendible. Anoche vinimos para tratar de capturar una imagen antes de que instalen la red y había muchísima gente”.
Por otro lado, la red también está pensada para proteger la fachada de la Clínica Dental Ibishi, donde los turistas estacionaban sin permiso e incluso se subían al tejado del local, según informó el diario The Japan Times.
Desde el establecimiento, declararon en un comunicado a CNN: “Era común que la gente nos insultara o arrojara cigarrillos encendidos cuando les pedíamos que movieran sus autos”.
Fujikawaguchiko es un pueblo turístico perteneciente a la prefectura de Yamanashi, ubicado a unos 100 km al oeste de Tokio.
Luego de la pandemia del covid-19, Japón reabrió sus fronteras y los turistas llegaron en masa. Se calcula que hubo más de 3.000.000 de visitantes por mes solo en marzo y en abril de 2024, una cifra que representa un nuevo récord y una tendencia que, al parecer, seguirá acentuándose.
Sin embargo, el país asiático no es el único que tiene problemas con el comportamiento de los turistas. En Venecia, las autoridades comenzaron a cobrar una entrada de USD 5 y, en Grecia, limitaron el número de gente que puede ingresar a la famosa Acrópolis de Atenas. En cuanto a Fujikawaguchiko, el problema es que los visitantes solo viajan allí por un día para tomarse fotos y luego regresan a Tokio, lo que significa que la economía local del pequeño pueblo no obtiene grandes beneficios del turismo.
En conversaciones con Reuters, Haruhito Tsuchiya, un vecino de 49 años que trabaja en el sector turístico, señaló: “He visto a gente cruzando por las carreteras, andando en monopatines eléctricos sin respetar las normas de tránsito y provocando accidentes. Últimamente, hubo muchos percances con turistas”.
Desde el municipio decidieron colocar la red en abril, después de que los carteles y los guardias de seguridad no lograran disuadir a los turistas.
“Es lamentable que hayamos tenido que tomar esta medida”, sostuvo un funcionario.
“La saturación turística y todas las consecuencias que trae, como la acumulación de basura, el aumento de las emisiones de CO2 y la imprudencia de los excursionistas, es la mayor complicación de ubicarnos frente al monte Fuji”, manifestó el año pasado a la CNN Masatake Izumi, funcionario de la prefectura de Yamanashi.
Por otra parte, las autoridades también han puesto en marcha un nuevo sistema de reservas en línea para acceder al sendero Yoshida del monte Fuji. En consecuencia, solo 4.000 personas podrán ingresar por día y tendrán que pagar una entrada obligatoria de unos USD 13.
Traducción de María Luz Avila